Se trata de uno de los tres prófugos más buscados, que fue capturado a metros del Monumento a la Bandera.
Era uno de los tres más buscados por la provincia de Santa Fe y fue capturado este fin de semana en un domicilio de Colón al 1200, en un departamento a metros del Monumento Nacional a la Bandera en Rosario, tras estar prófugo durante dos años.
Tras meses de vigilancia encubierta, la Central de Inteligencia junto a la Tropa de Operaciones Especiales allanaron la vivienda y atraparon a Bilbao en un escondite secreto que había preparado para la fuga.
El prófugo se ocultó en una especie de ducto de las cañerías del edificio, acondicionado con una escalera para poder escapar desde el baño al estilo de las fugas del famoso narco mexicano “Chapo” Guzmán.
Para llegar a su arresto, los investigadores siguieron a la organización que lidera su hermano, Brian Walter Bilbao, todavía prófugo.
Desde enero, la policía montó un operativo encubierto en el complejo de Colón al 1200, donde cumple detención domiciliaria Guadalupe Torres Servín, pareja de Waldo, acusada de ser testaferro de la banda.
Una intervención a las líneas telefónicas de Servín dio un dato clave: la mujer de Bilbao había solicitado pastillas anticonceptivas, aunque nunca se la había visto acompañada. Esa pista reforzó la hipótesis de que Waldo estaba escondido en el departamento.
Por su captura se ofrecía una recompensa de $50 millones, lo que lo convertía en uno de los objetivos prioritarios de la provincia.
El operativo fue realizado por la Unidad de Acciones Especiales de la Provincia de Santa Fe, dependiente de la Central de Inteligencia y Operaciones Especiales (CIOPE), junto a las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la Policía de Santa Fe.