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Un día antes que Rocío se hizo presente ante los fiscales Vanesa Morla, la hermana de Matías. También abogada, esposa de Maximiliano Pomargo, Vanesa Morla reconoció que cobraba un salario del Diez y negó las compras de alcohol.
“Hay un antes y un después de la pandemia” señaló Vanesa Morla, hermana del abogado Matías y pareja de Maximiliano Pomargo. En su declaración detalló que Maradona “era fanático de los médicos, de hacerse chequeos, por un dolor de uña ya quería que lo vea un especialista” pero que todo cambió con el coronavirus, al que le tuvo miedo y lo deprimió.
“Mi sueldo lo pagaba Maradona” confesó. Vanesa Morla no solo vivió de una remuneración aportada por el Diez, si no que indirectamente actuaba como mediadora entre su billetera y los pagos a distintos prestadores, por ejemplo los médicos. “Yo no decidía cuánto cobraban los empleados, pero los escuchaba y estaba entre las partes” dijo. Sin embargo, en el expediente, consta cómo Morla le negaba aumentos de sueldo a los médicos, se encargaba de recolectar las facturas de cada pago, y era la responsable de la compra de medicamentos tras las ordenes de la psiquiatra.
Los abogados de todas las partes y los fiscales no le hicieron ninguna mención a Vanesa Morla sobre las coimas que recibía de parte de Leopoldo Luque. Recordemos que el médico cobraba y automáticamente le realizaba una trasferencia a la hermana de Matías Morla con el 20% de su sueldo, que iba directamente a la caja de ahorro de la destinataria. “No se puede preguntar por la comisión de un delito durante una testimonial” aseguró uno de los abogados que presenció la declaración.
Después de una breve interrupción por un corte de luz, Vanesa Morla brindó algunos detalles más. “Quizás si había algún cumpleaños o algún invitado, se compraba alcohol, pero solo para eventos sociales” afirmó, aunque en el expediente surgen conversaciones donde estaba al tanto de los tickets de compra en el supermercado con gran cantidad de bebidas alcohólicas, aunque siempre por decisión de Diego.
Mario Baudry, abogado por parte de Dieguito Fernando, estuvo presente en el zoom escuchando la declaración de la Morla mujer. Le hizo tres preguntas, y una fue por una conversación que surge de los momentos previos a la decisión de que Maradona continúe su internación en una casa, y no en un centro de rehabilitación. Vanesa Morla, en diálogo con Leopoldo Luque, el 9 de noviembre le dice: “Quieren meterlo ahí (en un centro de rehabilitación) para quedarse con todo”. Baudry le preguntó por qué dijo eso, y Vanesa contestó: “Fue un comentario desubicado, lo admito, pero sin un fin. Le pido perdón a whatsapp y a Dios por alguna de las cosas que dije” sentenció.
Vanesa Morla, Rocío Oliva, el médico de confianza de Víctor Stinfale, Rodolfo Benvenutti, el exnovio de Gianinna Maradona, Luciano Strassera y el chofer, Maximiliano Trimarchi, fueron los cinco nuevos testigos que sumaron sus declaraciones al expediente. Ya son más de 20 personas en total, las que fueron escuchadas por los fiscales para poder tener más información acerca de la vida, la salud, el manejo y el desmanejo de la vida de Diego Armando Maradona. Los fiscales, a esta hora, tienen un nombre apuntado como posible nuevo imputado: el doctor Pedro Di Spagna, médico clínico de Swiss Medical, quien estuvo al tanto de todos los controles a Maradona durante su internación en el barrio de Tigre.