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Delincuentes realizaban estafas virtuales desde la cárcel de Batán. Uno de los afectados fue el diputado José Luis Espert.
La investigación se inició en noviembre del año pasado con la denuncia de una estafa por medio de un llamado telefónico. Un falso empleado bancario alertaba a la víctima de movimientos extraños en su tarjeta, para evitar otro ciberataque le asignaba un nuevo número de cuenta para transferir su dinero y así resguardarlo. De esta manera los delincuentes se quedaban con la plata. Entre las víctimas está el diputado José Luis Espert.
Para conocer el funcionamiento de la banda se realizaron varios trabajos de investigación a través de escuchas telefónicas, pedidos de información a entidades bancarias y cruce de datos informáticos.
Los llamados fueron identificados desde celulares localizados en la cárcel de Batán, Mar del Plata.
En la Unidad Carcelaria 15 se requisaron pabellones y se identificaron a los jefes de la banda a los cuales se les secuestraron dispositivos electrónicos y anotaciones.
También detuvieron a los tres cómplices que operaban fuera de la cárcel y eran los encargados de la logística, compra de celulares, tarjeta SIM y de retirar el dinero robado a las personas estafadas.