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Bruselas propone frenar los vuelos procedentes desde África, tal como ya han hecho Reino Unido y Alemania, ante la creciente preocupación por esta variante
La Unión Europea trata de blindarse ante la nueva cepa sudafricana del coronavirus. Para ello, Bruselas propone frenar los vuelos procedentes de varios países de África, medida que ya adoptaron Reino Unido, Alemania, Italia, Austria y la República Checa ante la creciente preocupación por esta variante.
La Comisión Europea propuso vetar el tráfico aéreo procedente de la región sudafricana para evitar la expansión en Europa de una nueva variante de COVID-19 que la OMS define como “preocupante”.
La nueva variante del SARS COV-2, que de momento se llama B.1.1.529 (es probable que la OMS le dé próximamente un nombre de letra griega como Nu), es la que tiene más mutaciones de todas las cepas conocidas hasta ahora