
La actividad se hunde junto con el empleo y la inversión. Según ADIMRA, la producción se encuentra en niveles comparables a los peores meses de la pandemia, mientras los datos oficiales confirman una destrucción masiva de empresas y puestos de trabajo desde la llegada del presidente al poder.
La industria argentina continúa en caída libre. En septiembre, la actividad metalúrgica se desplomó 5,2% interanual y 1,1% respecto de agosto, según un informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA). De esta manera, entre enero y septiembre de 2025 el sector apenas logró un avance de 0,7%, que no alcanza para compensar la recesión acumulada desde el inicio del ajuste libertario.
En términos históricos, la producción metalúrgica se ubica 30% por debajo de sus picos de actividad. La utilización de la capacidad instalada (UCI) cayó a 44,5%, un nivel similar al registrado entre marzo y junio de 2020, en plena pandemia.
En comparación con el año pasado, la UCI se derrumbó 5,6 puntos porcentuales, lo que confirma que buena parte del aparato industrial opera a media máquina o directamente paralizado. La crisis se extiende también al empleo: las empresas del sector registraron una caída interanual del 3,2% en el número de trabajadores y un descenso de 0,3% respecto de agosto. Todas las provincias mostraron números rojos. Buenos Aires y Córdoba cayeron 6,2%, Santa Fe 3,5%, Mendoza 5,1% y Entre Ríos 3,2%, según ADIMRA. El panorama hacia adelante no ofrece alivio. El 77,5% de las empresas cree que su nivel de producción se mantendrá o disminuirá.