Confirmado: las elecciones en Tucumán serán el próximo 11 de junio
Ocurrió en Córdoba. El hombre es jubilado y tuvo un gesto desinteresado que le volvió de una manera inesperada
En Córdoba, unos bandidos se robaron una planta de un cantero que queda en la puerta de una perfumería. Días más tarde, las cámaras de seguridad del local captaron un movimiento extraño: Segundo, un vecino, se acercó con una planta de aloe vera y una pala. La plantó y se fue.
Sin decir nada, los dueños y empleados del lugar -conmovidos- rastrearon al misterioso jardinero y llegaron hasta Segundo, un jubilado que cobra la mínima y que -para llegar a fin de mes- cocina viandas. De esa forma también paga los remedios de su esposa, que sufre un problema de salud.
Desde la perfumería se pusieron en campaña para tratar de devolver el hermoso gesto del hombre. Y, entre empleados, clientes y allegados, llegaron a juntar casi 200 mil pesos. Además, prometieron conseguirle un horno pizzero para que Segundo pueda multiplicar su producción.
A veces los buenos gestos, y aún más los que son desinteresados, tienen final feliz.